Ñemboja digital Módulo 1 - Semana 15

1. ¿Qué entendemos por consumos problemáticos?

Vivimos en una sociedad que fomenta el consumo generalizado de todo tipo de bienes y servicios, que no estrictamente son necesarios para vivir, sino que tienen como fin sentirse parte, ser, pertenecer. Debemos comprender los consumos de sustancias psicoactivas entre los jóvenes, dentro de un marco en el que, por un lado se experimenta la presión por consumir más ciertos objetos - tecnología, ropa, viajes, etc.- pero al mismo tiempo, se castigan otros consumos, como los de sustancias psicoactivas.
Aparece entonces el concepto de “sociedad de consumo” que comienza a ser un término utilizado en la economía a partir de la Revolución Industrial y tras la Segunda Guerra Mundial. Así pues, una sociedad de consumo es aquella que basa su sistema en el consumo masivo de bienes y servicios.
A su vez, la publicidad y el marketing juegan un papel fundamental en este tipo de sociedades. 
Entre las características que definen una sociedad de consumo, cabría resaltar las siguientes:
●       Son sociedades basadas en un sistema capitalista.
●       Existe una gran variedad de bienes y servicios en el mercado.
●       Son sociedades industrializadas.
●       En dichas sociedades, la acumulación de bienes es igual a un mayor bienestar.
●       Para que mejore la economía en estas sociedades, se entiende que debe crecer el consumo.
●       Por esta razón, si el consumo se reduce, se tiende a creer que la economía no va bien.
●       La publicidad y el marketing juegan un papel esencial en estas sociedades.
●       La obsolescencia programada (se limita la vida útil de un producto) es importante en este tipo de sociedades.
●       También lo hace la inflación, que juega con las expectativas del consumidor.
●       El crédito, en este tipo de sociedades, es bastante fluido.
 
Con la llegada de la Revolución Industrial, el exceso de producción debía alinearse con un mayor consumo de las sociedades. Para ello, basados en un modelo capitalista, los Estados promovieron un mayor consumo, con el fin de dar salida a toda esa producción que había traído la industrialización. En estas sociedades desarrolladas, el consumismo es una tendencia creciente.
 Hay distintos tipos de consumos de sustancias psicoactivas: pueden ser experimentales, ocasionales o frecuentes.
Hablamos de consumos no problemáticos cuando no afectan significativamente nuestras relaciones ni las actividades que realizamos. Por el contrario, hablamos de consumos problemáticos cuando afectan negativamente y en forma ocasional o crónica, aspectos de nuestra vida, como ser: nuestra relación con amigos, pareja o familia, nuestra salud psíquica o física, o nuestro desempeño en el trabajo o los estudios.
De las personas que consumen sustancias psicoactivas, la mayoría no tiene consumos problemáticos. No obstante, es importante tener en cuenta que usar sustancias psicoactivas, cualquiera sea, tiene riesgos.