Ñemboja digital Módulo 1 - Semana 3

4. CRITERIOS PARA ORDENAR LA BIODIVERSIDAD

Los seres humanos siempre han tenido la necesidad de agrupar y organizar los elementos de su entorno, ya que eso les facilita comprender y relacionarse con él. De todo lo que se encuentra en ese entorno, los seres vivos con los que habita siempre han sido de su mayor interés: nombrarlos, describirlos, entenderlos y clasificarlos son actividades que han ocupado una gran parte de sus esfuerzos. 

Al igual que nosotros tenemos un nombre y un apellido para diferenciarnos y que no haya error a la hora de identificarnos, los científicos han pensado que los seres vivos también necesitan “nombre y apellido"; es decir, dos palabras para nombrarlos y que esa nomenclatura fuera única para evitar confusiones.

Este modo de clasificar se lo debemos a Carl Linneo (1707-1778), quien fue un naturalista sueco que tomando como base los trabajos de Aristóteles estableció, 2.000 años después, las bases del actual sistema de clasificación de los seres vivos., que cuando quería hablar de alguna especie con otros científicos tenía el problema de cómo referirse a ella para que no hubiera error, por lo que ideó el sistema denominado NOMENCLATURA BINOMIAL.

Esta nomenclatura consiste en asignar a las distintas especies un nombre formado por dos palabras.

  • La segunda palabra se escribe en minúscula y nos indica la especie

  • Ambas se escriben en letra cursiva cuando se escribe digitalmente, o subrayada si se escribe a mano.

    Dentro de cada una de esas categorías, los organismos también reciben nombres en latín. Veamos como ejemplo la clasificación completa de la especie humana:

     

    En el siglo IV a.C. Aristóteles clasificó a los seres vivos en animales y vegetales, surgiendo de esta forma los dos primeros reinos. Pero no fue hasta los años sesenta cuando el norteamericano R. H. Whittaker propuso la clasificación de los seres vivos en CINCO REINOS, atendiendo a:

            Tipo de célula (procariota o eucariota) 

            Número de células por el que estuvieran formados (una o muchas)

            Forma de nutrición (autótrofa o heterótrofa).