Ñemboja digital Módulo 1 - Semana 5

3. ¿QUÉ ES LA CONTAMINACIÓN DEL AIRE??

3.1. ¿Qué es la contaminación del aire?

Enfermedades Respiratorias

La contaminación del aire puede afectar el desarrollo de los pulmones y está implicada en el desarrollo de enfisema, asma y otras enfermedades respiratorias, como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).

El MP y el óxido de nitrógeno están relacionados con la bronquitis crónica.

 

 

Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC)

La enfermedad pulmonar obstructiva crónica, abreviada como EPOC, es la tercera causa de muerte en todo el mundo. El desencadenante principal de esta condición suele ser la exposición continuada a irritantes capaces de dañar los pulmones y las vías respiratorias, sobre todo el tabaco. Se estima que hasta el 15 % de las personas fumadoras terminarán desarrollando EPOC a lo largo de su vida.

Es una enfermedad progresiva y los signos clínicos no suelen hacerse evidentes hasta que el daño en los pulmones es considerable. Entre ellos, se incluyen sibilancias, falta de aire, opresión en el pecho, tos permanente con esputos, falta de energía y bajada de peso involuntaria. El daño producido en los pulmones no se puede revertir, pero dejar de fumar y evitar la exposición a químicos irritantes sí que permite experimentar una clara mejoría a nivel de síntomas.

Asma

El asma es una enfermedad respiratoria crónica que provoca la hinchazón y el estrechamiento de las vías respiratorias pulmonares. Sus signos y síntomas principales, como los de otras muchas condiciones que involucran al aparato respiratorio, comprenden falta de aire, dolor de pecho, sibilancias y problemas para dormir, entre otros. 

No está claro por qué algunas personas desarrollan asma y otras no, aunque se sospecha que su aparición depende de factores tanto ambientales como genéticos. De todas formas, sí que hay diversos compuestos que pueden desencadenar los conocidos ataques de asma, entre los que destacan el polen, el aire frío, los contaminantes, la actividad física y las infecciones respiratorias. El asma no tiene cura, pero se puede controlar a nivel sintomático con corticoides inhalados, teofilina, modificadores de leucotrienos y otros medicamentos.

 

Infecciones de las vías respiratorias superiores

Las infecciones agudas de las vías respiratorias o aéreas superiores son muy comunes en la población general, sobre todo en picos estacionales como otoño e invierno, en los que las personas tendemos a aglomerarnos más en espacios cerrados. Aquí se engloban algunos de los cuadros más conocidos y capaces de contagiarse a través de toses y estornudos, como el catarro, la gripe, la sinusitis, la faringitis o la epiglotis.

La mayoría de los agentes causales de estas infecciones son de tipo vírico, especialmente los géneros Rhinovirus, Coronavirus, Influenzavirus, Parainfluenzavirus, Pneumovirus y Adenovirus, entre otros.

 

Enfermedades Cardiovasculares

El material particulado fino puede afectar la función de los vasos sanguíneos y acelerar la calcificación en las arterias.

Diversas investigaciones establecieron vínculos entre la exposición diaria a corto plazo de mujeres posmenopáusicas a los óxidos de nitrógeno y un mayor riesgo de derrame cerebral hemorrágico.

La exposición a la contaminación TRAP (contaminantes del aire relacionados con el tráfico) puede dar como resultado niveles reducidos del llamado colesterol bueno, lo que aumenta el riesgo de enfermedad cardiovascular.

La exposición a la contaminación TRAP también aumenta el riesgo de que una mujer embarazada sufra cambios peligrosos en la presión arterial, conocidos como trastornos hipertensivos, los cuales son una de las principales causas de parto prematuro, bajo peso al nacer, y enfermedad y muerte de madres y bebés.

 

Cáncer

Un gran estudio de más de 57,000 mujeres encontró que vivir cerca de carreteras principales puede aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de mama de una mujer.

Estudios encontraron que otras sustancias tóxicas transportadas por el aire, en especial el cloruro de metileno que se utiliza en productos en aerosol y removedores de pintura, también están asociadas con un mayor riesgo de desarrollar cáncer de mama.

La exposición ocupacional al benceno, un químico industrial y componente de la gasolina, puede causar leucemia y está asociado con el linfoma no Hodgkin.

Un estudio a largo plazo, del año 2000 al 2016, encontró una asociación entre la incidencia de cáncer de pulmón y una mayor dependencia del carbón para la generación de energía.