Ñemboja digital Módulo 1 - Semana 16
Sitio: | Campus Virtual |
Curso: | Secundaria a Distancia - Aula 2 |
Libro: | Ñemboja digital Módulo 1 - Semana 16 |
Imprimido por: | Invitado |
Día: | domingo, 22 de diciembre de 2024, 09:08 |
1. Estilo de vida acelerado: Fenómeno de las sociedades actuales
El estilo de vida acelerado es un fenómeno que caracteriza a muchas sociedades contemporáneas, especialmente en contextos urbanos y desarrollados. Este estilo de vida se define por la rapidez y la constante actividad que marcan la rutina diaria de las personas, a menudo influenciada por factores como la tecnología, el trabajo, y las expectativas sociales.
1.1. Características del estilo de vida acelerado
El estilo de vida acelerado se caracteriza por una constante sensación de urgencia y falta de tiempo, impulsada por la multitarea, el uso omnipresente de la tecnología y largas jornadas laborales. Este ritmo frenético a menudo resulta en altos niveles de estrés y ansiedad, problemas de salud física y mental, y una desconexión social significativa, ya que las personas intentan equilibrar múltiples responsabilidades y expectativas en un entorno que valora la productividad y el consumo rápido.
Multitarea: Las personas realizan múltiples actividades al mismo tiempo, como trabajar mientras comen o revisar el correo electrónico durante una reunión.
Tecnología omnipresente: El uso constante de dispositivos móviles y la conectividad 24/7.
Jornadas laborales prolongadas: Largas horas de trabajo y la tendencia a llevar trabajo a casa.
Escasez de tiempo: Sensación de falta de tiempo para realizar todas las actividades diarias.
Consumo rápido: Preferencia por comidas rápidas, entretenimiento breve y soluciones instantáneas.
Speed watching: Podríamos definirlo como la tendencia a reproducir principalmente vídeos y podcasts, pero también mensajes en formato audio enviados a través de plataformas como WhatsApp, a una velocidad mayor de la que fueron producidos.
1.2. Causas del estilo de vida acelerado
Los avances tecnológicos han incrementado la velocidad de la comunicación y creado una expectativa de respuesta inmediata. La globalización ha intensificado la competencia y la necesidad de adaptación rápida a los cambios del mercado. Las expectativas laborales exigen mayor productividad y disponibilidad, mientras que la cultura del consumismo promueve un consumo constante y rápido como símbolo de éxito. Además, la urbanización con su ritmo de vida rápido y numerosos estímulos contribuye a esta aceleración, llevando a las personas a una vida cada vez más frenética.
Avances tecnológicos: La tecnología ha aumentado la velocidad de la comunicación y la información, creando una expectativa de respuesta inmediata.
Globalización: Mayor competencia y la necesidad de adaptarse rápidamente a cambios en el mercado global.
Expectativas laborales: Presión para ser más productivos y disponibles fuera del horario laboral.
Cultura del consumismo: La promoción de un consumo rápido y constante como símbolo de éxito y felicidad.
Urbanización: La vida en las ciudades suele estar marcada por un ritmo más rápido y una mayor cantidad de actividades y estímulos.
1.3. Consecuencias del estilo de vida acelerado
El estilo de vida acelerado, caracterizado por la constante prisa y la multitarea, puede llevar a diversas consecuencias negativas, tanto a nivel físico como mental. Este ritmo de vida puede causar estrés y ansiedad crónicos, problemas de salud como enfermedades cardiovasculares y trastornos del sueño, y afectar negativamente las relaciones personales debido a la falta de tiempo y atención. Además, la constante conexión digital y la presión laboral contribuyen al agotamiento y el burnout, disminuyendo la calidad de vida y la satisfacción personal.
Estrés y ansiedad: Aumento de niveles de estrés y problemas de salud mental debido a la constante presión y falta de descanso.
Problemas de salud física: Enfermedades relacionadas con el estilo de vida, como problemas cardiovasculares, obesidad y trastornos del sueño.
Desconexión social: Menor tiempo para relaciones personales y familiares, afectando la calidad de las interacciones sociales.
Superficialidad: Tendencia a enfocarse en resultados rápidos y superficiales en lugar de en profundizar en actividades o relaciones.
Agotamiento y burnout (*): Sentimientos de agotamiento extremo y pérdida de interés en el trabajo y otras actividades.
(*) Burnout: La definición más aceptada es la de C. Maslach, que lo describe como una forma inadecuada de afrontar el estrés crónico, cuyos rasgos principales son el agotamiento emocional, la despersonalización y la disminución del desempeño personal.
1.4. Situaciones de emergencia debido a una vida acelerada
Una vida acelerada puede aumentar la probabilidad de enfrentar diversas situaciones de emergencia en la vida cotidiana, debido a la falta de tiempo, estrés y descuido en el autocuidado y la seguridad. Te presentamos algunos ejemplos:
Accidentes de Tráfico
Es el que ocurre sobre la vía y se presenta súbita e inesperadamente, determinado por condiciones y actos irresponsables potencialmente previsibles, atribuidos a factores humanos, vehículos preponderantemente automotores, condiciones climatológicas, señalización y caminos, los cuales ocasionan pérdidas prematuras de vidas humanas y/o lesiones, así como secuelas físicas o psicológicas, perjuicios materiales y daños a terceros.
Las causas más comunes son por conducir a alta velocidad, distracciones al volante (uso de dispositivos móviles), la fatiga y el consumo de sustancias.
Las consecuencias son el aumento en el riesgo de colisiones, lesiones graves y accidentes mortales.
Problemas de Salud Agudos
En medicina, se llama enfermedad aguda a aquella que tiene un inicio y un fin claramente definidos y es de corta duración. Actualmente, se considera que su duración es menor a tres meses. Es el término contrario a «enfermedad crónica».
Las causas son el estrés crónico y falta de descanso o insomnio.
Las consecuencias pueden ser desde los infartos, ataques de pánico, desmayos, hipertensión y otros problemas de salud súbitos.
Accidentes Domésticos
Los accidentes en el hogar se definen como aquellos acontecimientos inesperados que ocurren tanto en la vivienda propiamente dicha como en el patio, el jardín, el garaje, el acceso a pisos o las escaleras.
Las causas más comunes son las prisas y la multitarea.
Las consecuencias son quemaduras, cortes, caídas y otros accidentes debido a la falta de atención.
Incendios Domiciliarios
Los incendios domésticos a menudo son causados por accidentes en la cocina, cigarrillos y el uso poco seguro de estufas o calentadores unitarios.
Las causas se pueden dar por olvidar apagar la estufa, sobrecargar enchufes eléctricos, uso descuidado de velas.
Las consecuencias son la pérdida de propiedades y riesgo de lesiones graves o muerte.
Problemas Digestivos
Son enfermedades que atacan el estómago y los intestinos, generalmente son ocasionadas por bacterias, parásitos, virus y algunos alimentos, como leche y grasas, aunque también existen algunos medicamentos que las provocan.
Las causas suelen ser la alimentación rápida y poco saludable.
Las consecuencias, intoxicaciones alimentarias, problemas gástricos y deshidratación.
Emergencias por Deshidratación o Exceso de Calor
Son trastornos ocasionados por el aumento de la temperatura del cuerpo como consecuencia de la exposición prolongada a altas temperaturas y humedad o el esfuerzo físico intenso (ejercicios) en altas temperaturas. En estas situaciones el cuerpo tiene dificultades para regular su temperatura.
Las causas, la falta de tiempo para hidratarse adecuadamente.
Las consecuencias, los golpes de calor, desmayos y otros problemas relacionados con la deshidratación.
Reacciones Alérgicas
Las reacciones alérgicas (reacciones de hipersensibilidad) son respuestas inadecuadas del sistema inmunitario a una sustancia que en condiciones normales es inofensiva. Por lo general, las alergias causan estornudos, ojos llorosos y pruriginosos, secreción nasal, picor en la piel y erupción cutánea.
Las causas se dan por la falta de tiempo para revisar ingredientes o tomar precauciones.
Las consecuencias, la anafilaxia y otras reacciones alérgicas severas.
1.5. Estrategias para manejar el estilo de vida acelerado
Afrontar un estilo de vida acelerado requiere adoptar estrategias que promuevan el equilibrio y el bienestar. La gestión eficaz del tiempo, como priorizar tareas y establecer límites claros entre el trabajo y la vida personal, es esencial. Practicar mindfulness y meditación ayuda a reducir el estrés y mejorar la concentración. Desconectarse periódicamente de la tecnología y dedicar tiempo a actividades recreativas y relaciones personales significativas también es crucial. Mantener una dieta equilibrada, hacer ejercicio regularmente y asegurar un buen descanso contribuyen a una mejor salud física y mental, permitiendo enfrentar el ritmo acelerado de manera más saludable y sostenible.
Gestión del tiempo: Priorizar tareas, establecer límites claros entre el trabajo y la vida personal, y aprender a decir "no".
Desconexión digital: Tomarse tiempos regulares para desconectarse de la tecnología y reducir el uso de dispositivos fuera del trabajo.
Mindfulness (*) y meditación: Practicar técnicas de mindfulness y meditación para reducir el estrés y mejorar el bienestar mental.
(*) Mindfulness: es una técnica de meditación que busca entrenar la mente para centrar la atención y redireccionar los pensamientos. Muchas personas la practican para reducir el estrés, mejorar su concentración o incrementar su bienestar emocional.
Vida saludable o autocuidado: Mantener una dieta equilibrada, hacer ejercicio regularmente y asegurarse de dormir lo suficiente.
Actividades recreativas: Dedicar tiempo a hobbies y actividades que proporcionen placer y relajación.
Relaciones personales: Fomentar relaciones personales significativas y dedicar tiempo de calidad a la familia y amigos.
Educación y preparación: Conocer y practicar primeros auxilios básicos y tener un plan de emergencia en caso de accidentes domésticos o de tráfico.
El estilo de vida acelerado es una característica distintiva de muchas sociedades actuales, con sus propias ventajas y desafíos. Si bien la tecnología y la globalización han aportado beneficios significativos, también es crucial encontrar un equilibrio que permita mantener la salud y el bienestar. Reflexionar sobre nuestras rutinas y tomar medidas conscientes para desacelerar pueden ayudarnos a vivir de manera más plena y saludable.
2. Las situaciones de emergencia en la vida cotidiana
En nuestro día a día, estamos expuestos a diversas situaciones que pueden poner en riesgo nuestra salud y seguridad. Desde accidentes domésticos hasta emergencias médicas, pasando por desastres naturales y problemas en el tránsito, las emergencias pueden ocurrir en cualquier momento y lugar.
Conocer cómo actuar de manera rápida y efectiva ante estas situaciones es fundamental para minimizar daños y salvar vidas.
Dentro de estas situaciones de emergencias que se suelen suscitar en nuestra vida cotidiana tenemos, por ejemplo:
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Accidentes domésticos (cortes, heridas, quemaduras, caídas)
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Emergencias médicas (ataque cardiaco, asfixia, reacciones alérgicas)
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Incendios (contemplando lo que son las evacuaciones, el uso de extintores, y las llamadas de emergencia)
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Desastres naturales (inundaciones)
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Emergencias en el tránsito (accidentes de tráfico y averías)
Primeros Auxilios: Conceptos básicos y Acciones inmediatas
Los primeros auxilios son el conjunto de técnicas y procedimientos de atención inmediata que se brindan a una persona que ha sufrido una lesión o una enfermedad repentina, hasta que pueda recibir atención médica profesional.
Veamos en detalles cada una de estas posibles situaciones de emergencia, iniciando por:
Los accidentes domésticos
Los accidentes domésticos son incidentes no planificados que ocurren en el hogar y resultan en lesiones, daños materiales o, en casos graves, la muerte. Estos accidentes pueden afectar a personas de todas las edades, pero los niños pequeños y los ancianos son especialmente vulnerables.
Cortes y heridas: Ocurren al usar cuchillos, tijeras u objetos afilados.
Se debe lavar con agua y jabón, aplicar presión para detener el sangrado, cubrir con un vendaje limpio o estéril y, si es necesario, buscar atención médica.
No se debe:
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No suponga que una herida menor está limpia porque no se pueden ver desechos ni suciedad dentro de ella. Lávela siempre.
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No respire sobre una herida abierta.
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No trate de limpiar una herida extensa, especialmente después de que el sangrado esté bajo control.
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No retire un objeto largo o profundamente incrustado. Busque atención médica.
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No hurgue ni retire los restos de una herida. Busque atención médica.
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No reintroduzca partes expuestas del cuerpo. Cúbralas con material limpio hasta que llegue la ayuda médica.
Quemaduras: Se suelen dar por contacto con estufas, hornos, líquidos calientes o productos químicos.
Hay que enfriar la zona quemada con agua fría durante al menos 10 minutos, no aplicar hielo ni cremas, cubrir con un paño o film plástico limpio y, si es grave, buscar atención médica.
Caídas: que se dan desde unas escaleras, sillas o al resbalarse en superficies mojadas.
Las lesiones más habituales son las contusiones, las lesiones articulares (esguinces, luxaciones) o incluso, la fractura de algún hueso.
Hay que mantener en reposo la zona afectada, sin moverla, aplica frío localmente (hielo envuelto en una compresa) para calmar el dolor, y dependiendo de la intensidad de éste, considera la necesidad de pedir ayuda al número de emergencias, para que sean ellos quienes valoren la posible gravedad de la lesión.
Si tras un golpe en la cabeza la persona sangra por el oído, tiene vómitos o pierde el conocimiento, pide ayuda cuanto antes a emergencias.
3. Las emergencias médicas
Las emergencias médicas son situaciones de salud críticas que requieren atención médica inmediata para prevenir el deterioro grave de la salud, la discapacidad permanente o la muerte. Estas emergencias pueden ocurrir en cualquier momento y lugar, y la respuesta rápida y adecuada es crucial para aumentar las posibilidades de un resultado favorable.
Ataque cardíaco: suele manifestarse con dolor en el pecho, dificultad para respirar, sudoración excesiva, náuseas.
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Si usted cree que alguien está teniendo un ataque cardíaco:
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Procure que la persona se siente, descanse y trate de mantener la calma.
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Afloje cualquier prenda de vestir ajustada.
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Pregúntele si toma medicamentos para el dolor torácico, por una enfermedad cardíaca conocida y ayúdele a tomarlos.
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Si el dolor no desaparece rápidamente con el reposo o al cabo de 3 minutos después de haber tomado la medicación, solicite ayuda médica urgente.
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Si la persona está inconsciente y no reacciona y no respira o no tiene pulso, llame al número local de emergencias, luego inicie la RCP.
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Si un bebé o un niño está inconsciente y no reacciona y no respira o no tiene pulso, administre la RCP durante 1 minuto, luego llame a emergencias.
No se debe:
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NO deje a la persona sola, excepto para pedir ayuda de ser necesario.
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NO permita que la persona niegue los síntomas y lo convenza a usted de no solicitar ayuda de emergencia.
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NO espere a ver si los síntomas desaparecen.
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NO le dé nada a la persona por vía oral, a menos que le hayan recetado un medicamento para el corazón.
3.1. Asfixia
La obstrucción de las vías respiratorias es una emergencia médica grave que ocurre cuando algo bloquea el flujo de aire hacia los pulmones, impidiendo la respiración adecuada. Esto puede suceder por varias razones, incluyendo la inhalación de alimentos, objetos pequeños, hinchazón de los tejidos de la garganta, o una reacción alérgica severa.
Durante la asfixia debemos tener algunas consideraciones:
NO intervenga si la persona está tosiendo con fuerza, si puede hablar o es capaz de inhalar y exhalar adecuadamente. Pero esté listo para actuar de inmediato si los síntomas empeoran.
NO abra a la fuerza la boca de la persona para intentar sujetar y sacar el objeto si la persona está consciente. Realice empujes abdominales y/o golpes de espalda para intentar expulsar el objeto.
Reacciones alérgicas: Las reacciones alérgicas son respuestas exageradas del sistema inmunológico a sustancias que normalmente son inofensivas para la mayoría de las personas. Estas sustancias, conocidas como alérgenos, pueden incluir alimentos, medicamentos, picaduras de insectos, sustancias inhaladas como el polen, ácaros del polvo, moho, o a sustancias de contactos como látex, productos químicos en cosméticos o detergentes.
Las reacciones alérgicas, leves a moderadas, pueden ser tratadas con:
Antihistamínicos para aliviar los síntomas de picazón, estornudos y urticaria.
Cremas de hidrocortisona para erupciones cutáneas.
Evitar el alérgeno conocido.
Y en las graves (anafilaxia):
Administrar una inyección de epinefrina (adrenalina) inmediatamente, si está disponible.
Llamar a emergencias y buscar atención médica de inmediato.
Mantener a la persona en una posición cómoda y tranquila hasta que llegue la ayuda.
Algunas consideraciones a tener si una persona está teniendo una reacción alérgica:
No suponga que cualquier inyección para alergias que la persona ya haya recibido brindará protección completa.
No ponga una almohada debajo de la cabeza de la persona si está teniendo problemas para respirar, ya que esto puede bloquear las vías respiratorias.
No le dé nada a la persona por la boca si está teniendo problemas para respirar.
3.2. Los incendios
Los incendios domiciliarios son incendios que ocurren en viviendas y propiedades residenciales. Pueden comenzar por diversas razones y, aunque pueden ser pequeños y controlables, también pueden convertirse rápidamente en peligrosos, causando daños significativos, lesiones graves o incluso la muerte.
Las causas de un incendio son múltiples. Pueden ir desde el uso inadecuado de estufas o cocinas y mala mantención de instalaciones eléctricas, hasta cigarros mal apagados.
Un pequeño incendio puede transformarse en uno fatal en pocos segundos. En minutos una casa se puede llenar de un espeso humo negro y caer envuelta en llamas.
Evacuación: Si se sucede una situación de incendio se debe evacuar el lugar inmediatamente siguiendo la ruta de escape más segura. Entonces:
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Mantener la calma
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Desalojar inmediatamente las instalaciones, utilizando las vías de evacuación establecidas al respecto.
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Cerrar las puertas que se vayan atravesando, y no utilizar los ascensores.
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No retroceder, ni detenerse en las salidas.
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Una vez fuera, alejarse de las fachadas de los edificios y acudir al punto de encuentro exterior.
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Atender las instrucciones del personal designado para emergencias.
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Queda totalmente prohibido entrar en los aparcamientos para retirar los coches.
3.3. Los desastres naturales
Inundaciones: Las inundaciones son desastres naturales que ocurren cuando el agua cubre áreas de tierra que normalmente están secas. Pueden resultar de diversas causas, como lluvias intensas, deshielo, desbordamiento de ríos, marejadas ciclónicas, fallos en infraestructuras hidráulicas como presas y diques, y otros fenómenos meteorológicos.
Las inundaciones pueden causar daños significativos a propiedades e infraestructuras, el medio ambiente y poner en peligro la vida humana y animal.
Algunas recomendaciones durante una inundación:
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Conservá la calma.
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Cerrá la llave de gas, agua y cortá la electricidad.
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Evacuá hacia una zona segura, que por lo general son las más altas.
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Mantené cerradas puertas y ventanas, para evitar corrientes de agua dentro de la vivienda.
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No usés ningún tipo de vehículo como auto, moto o bicicleta.
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No intentés caminar o nadar por caminos inundados, y menos ubicarse cerca de postes de electricidad o cables.
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Prestá atención solo a los avisos de las autoridades a cargo mediante un radio a pilas o la radio en el celular.
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Bebé agua potabilizada, no utilicés el agua de la canilla.
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Agenda los números de Protección Civil, Bomberos y Policía.
3.4. Las emergencias en el tránsito