1. CULTURA
¡Hola a todos y todas!
Bienvenidos a la tercera semana del Módulo II del programa Ñemboja-Digital. En esta clase, exploraremos un tema fundamental en la comprensión de la sociedad: la Cultura. A lo largo de esta semana, reflexionaremos sobre las diferentes definiciones de cultura, desde una visión humanista hasta una visión antropológica, y cómo estas perspectivas influyen en la construcción de la identidad. Además, abordaremos conceptos como la diversidad cultural, la discriminación, y el papel crucial que juegan en nuestra convivencia.
Los invito a participar activamente y a compartir sus ideas y experiencias, ya que el aprendizaje será más enriquecedor si lo construimos entre todos.
¡Vamos a empezar!
1.
CULTURA
Usamos la palabra cultura o alguna derivada cuando, por ejemplo, nos referimos a personas cultas o incultas, a la cultura popular o a la cultura precolombina. En cada uno de estos casos, la palabra tiene un significado diferente.
Podemos sintetizar básicamente en dos definiciones de cultura:
a) Visión humanista (elitista):
La cultura es el resultado de cultivar el conocimiento humano por medio del ejercicio de las facultades intelectuales y artísticas. Esta visión llama “cultas” a las manifestaciones refinadas relacionadas con la literatura, las ciencias y las artes, entre las que se incluyen la música clásica, la pintura, la escultura, etc. Esta concepción reduce el ámbito de la cultura a un selecto grupo de personas.
b) Visión antropológica:
Para esta mirada, la cultura es toda manifestación del quehacer humano. Es el conjunto de prácticas llevadas a cabo por todos los sujetos sociales más allá de su estado de naturaleza. La cultura incluye la lengua, los valores, las leyes, la vestimenta, la vivienda, la organización económica y todas las expresiones artísticas. En definitiva, todos los hábitos y las capacidades adquiridas por el Hombre en tanto miembro de la sociedad. Para esta visión, todo ser humano es culto. Y todo ciudadano construye la cultura.
1.1. Primer concepto en un sentido antropológico
En 1871, el antropólogo inglés Edward Tylor (1832-1917) creó la siguiente definición:
Una idea de cultura muy extendida en los últimos años incluye el sentido que tienen los fenómenos y eventos en la vida cotidiana para un grupo humano determinado. Cuando decimos sentido nos referimos al conjunto de significados que una comunidad le otorga a esos fenómenos y eventos, y que es exclusivo de ese grupo. Estos significados cobran vida en las prácticas y en las relaciones con las demás personas y con el ambiente. Por ejemplo, si queremos conocer la cultura futbolística argentina, tenemos que preguntar qué significa vestir la camiseta de un club o juntarse con amigos a ver un partido en un bar.
1.2. 1.2. El contexto cultural como construcción de la identidad
El contexto cultural es todo aquello que forma parte del entorno y es importante en la formación y el desarrollo de la cultura de un grupo humano. Quienes viven dentro de un determinado contexto cultural comparten significados que les permiten comunicarse y entenderse entre sí. Dentro de cada contexto las personas construyen su cosmovisión, es decir, la manera de entender el mundo y a través de la relación con los otros construyen su identidad.
Pero, el contexto no es estático, ya que está formado tanto por los contenidos culturales tradicionales de la comunidad como por nuevas necesidades (individuales y colectivas) que surgen del contacto con un contexto social más amplio que lo incluye. Esta red de sentidos se desarrolla en un lugar determinado, en un momento histórico, y está en relación con el proceso productivo de esa cultura.
Los contextos pueden ser muy variados: la familia, la escuela, el barrio, una localidad turística, etc.
1.3. La identidad
La cultura de un grupo, puede pensarse como un rasgo de identidad grupal, y en gran medida la identidad individual se construye en relación a esas identidades culturales y colectivas.
La identidad es una construcción de sentido permanente: los individuos vamos construyendo y dándole forma a nuestra identidad en interacción con otras personas, y de acuerdo con intereses, procedencias y contextos particulares.
La construcción de identidad es un proceso cultural, material y social:
● Es cultural porque los individuos se definen a sí mismos dentro de grupos cuyos miembros comparten rasgos que los unen, por ejemplo, la nacionalidad, la religión, etc.
● Es material porque a partir de objetos las personas también logran autorreconocerse. A través del aspecto material la identidad se relaciona con el consumo y las industrias culturales, ya que el consumo de mercancías y bienes culturales son tanto satisfacción de necesidades como una manera determinada culturalmente de consumir.
● Es social porque se construye a partir de la interacción con otros, del conocimiento y la mirada que los otros tienen de mí o de nosotros.
2. DIVERSIDAD, IGUALDAD Y DIFERENCIA.
Todos somos iguales porque somos personas, seres racionales y libres. Todos somos igualmente dignos y este principio se pone de manifiesto en la igualdad ante la ley y en el reconocimiento universal de los derechos. Esto quiere decir que a pesar que nos diferenciemos en las características físicas, las ideas, la cultura y los sentimientos, se nos deben garantizar las mismas oportunidades y condiciones de ejercer plenamente nuestros derechos.
Al mismo tiempo, las diferentes identidades, culturas y condiciones físicas y sociales hacen que la diversidad humana sea una realidad que, además resulta positiva, porque hace que todo el mundo sea variado y rico.
Por ello, si en la naturaleza concreta prevalece la diferencia y la diversidad, también ocurre lo mismo en las sociedades humanas: son heterogéneas, diversas. Esto lo podemos comprobar en la vida cotidiana: las personas son distintas físicamente pero también lo son en sus capacidades, habilidades o formaciones culturales, ya que los individuos nacen en contextos familiares, económicos, sociales y culturales diferentes. Se afirma una igualdad universal (algo para todas las personas por igual) pero al mismo tiempo en la vida diaria y concreta observamos la diferencia y la diversidad.
Entendemos lo “universal” por aquello que tenemos en común, que es nuestra condición humana, nuestra dignidad. Más allá de nuestras diferencias, todos somos humanos.
Hay una permanente tensión entre la búsqueda de la igualdad y la realidad, o sea, entre lo universal y lo particular.
El respeto de esa diversidad, es la base de la igualdad. Sin embargo, muchas veces esas diferencias se utilizan para discriminar injustamente a las personas. A través de la historia, armonizar la igualdad con lo considerado diverso se ha manifestado en forma de conflictos serios: guerras, persecuciones, injusticias.
2.1. La Diversidad Cultural Humana
La diversidad cultural es una característica fundamental de la humanidad que refleja la variedad de experiencias, creencias, prácticas, lenguas, y formas de vida que existen entre diferentes grupos humanos en todo el mundo. Esta diversidad no solo enriquece a las sociedades, sino que también juega un papel crucial en la preservación de la identidad y el desarrollo social.
La diversidad cultural se refiere a la coexistencia de diferentes culturas en un espacio determinado, ya sea una comunidad local, un país, o a nivel global. Incluye una variedad de expresiones culturales como lenguas, religiones, costumbres, tradiciones, arte, gastronomía, y sistemas de valores.
2.2. Importancia de la Diversidad Cultural
a. Enriquecimiento de la sociedad
La diversidad cultural permite el intercambio de ideas, costumbres y conocimientos entre diferentes grupos, lo que enriquece a la sociedad en su conjunto. Las diversas formas de vida y perspectivas culturales contribuyen al desarrollo de la creatividad, la innovación, y la empatía entre los individuos.
Ejemplo: La música, la literatura y el arte de diferentes culturas han influido en las expresiones artísticas de otras regiones, generando un crisol de creatividad y nuevas formas de expresión.
b. Preservación de la identidad
Para los individuos y comunidades, la cultura es una fuente de identidad y pertenencia. Mantener la diversidad cultural es esencial para preservar las tradiciones, lenguas y costumbres que definen a un grupo y que se transmiten de generación en generación.
Ejemplo: Las comunidades indígenas en América Latina mantienen vivas sus lenguas y prácticas ancestrales a pesar de la presión de la globalización, lo que fortalece su identidad y resiliencia cultural.
c. Promoción de la tolerancia y el entendimiento
La diversidad cultural fomenta la tolerancia y el entendimiento mutuo entre diferentes grupos étnicos y culturales. Al interactuar y aprender sobre otras culturas, las personas pueden superar prejuicios y estereotipos, promoviendo la paz y la cooperación.
Ejemplo: En sociedades multiculturales como Canadá o Australia, se promueven políticas de inclusión y respeto por las culturas de los inmigrantes, lo que contribuye a una convivencia armoniosa.
2.3. Factores que contribuyen a la Diversidad Cultural
a. Historia y Geografía
Las características geográficas y la historia de un lugar influyen en la formación de su cultura. Las barreras naturales, como montañas y océanos, y los acontecimientos históricos, como las migraciones, colonizaciones y guerras, han dado forma a la diversidad cultural en diferentes regiones.
El aislamiento geográfico de Japón durante siglos permitió el desarrollo de una cultura única, con tradiciones y prácticas que difieren significativamente de las de otras naciones asiáticas.
b. Migración y Globalización
La migración y la globalización han aumentado la diversidad cultural al facilitar el movimiento de personas y el intercambio cultural a nivel global. Aunque esto ha llevado a una mayor mezcla de culturas, también ha planteado desafíos en términos de preservar las culturas locales.
Ciudades globales como Nueva York o Londres son ejemplos de la diversidad cultural resultante de la inmigración, donde se pueden encontrar comunidades de casi todas las culturas del mundo.
2.4. Desafíos
a. Preservación de las culturas minoritarias
Un desafío importante es la preservación de las culturas minoritarias en un mundo globalizado, donde las culturas dominantes a menudo eclipsan a las más pequeñas. La pérdida de lenguas y costumbres tradicionales es un riesgo continuo.
Muchas lenguas indígenas están en peligro de extinción debido a la creciente influencia de lenguas globales como el inglés o el español, lo que representa una pérdida significativa de patrimonio cultural.
b. Conflictos Culturales
La diversidad cultural también puede generar conflictos cuando las diferencias culturales se perciben como amenazas o cuando las políticas de asimilación intentan imponer una cultura dominante sobre otras.
En algunos países, las políticas de asimilación han intentado erradicar las lenguas y tradiciones indígenas, lo que ha provocado tensiones y conflictos con las comunidades afectadas.
c. Globalización y Homogeneización Cultural
La globalización ha llevado a una homogeneización cultural, donde las culturas locales se ven influidas por las tendencias globales, a menudo de manera que diluye o transforma sus características originales.
El predominio de la cultura popular estadounidense en medios de comunicación y entretenimiento ha influido en las costumbres y modos de vida de muchas otras culturas, especialmente entre los jóvenes.
2.5. Promoción y Protección de la Diversidad Cultural
a. Políticas Culturales
Gobiernos y organizaciones internacionales promueven políticas para proteger y promover la diversidad cultural, reconociendo la importancia de preservar el patrimonio cultural y respetar la pluralidad de expresiones culturales.
La UNESCO ha declarado varios sitios y tradiciones como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, reconociendo su valor y promoviendo su conservación.
b. Educación Multicultural
La educación multicultural es fundamental para sensibilizar a las personas sobre la importancia de la diversidad cultural, fomentando el respeto y la apreciación por otras culturas desde una edad temprana.
Programas educativos que incluyen el estudio de diferentes culturas y lenguas en el currículo escolar ayudan a los estudiantes a desarrollar una visión global y respetuosa de la diversidad.
La diversidad cultural es una riqueza invaluable que define a la humanidad. Aunque enfrenta desafíos en un mundo globalizado, es esencial proteger y promover la diversidad cultural para garantizar que todas las culturas, especialmente las minoritarias, puedan florecer. La interacción respetuosa entre culturas no solo enriquece a las sociedades, sino que también contribuye a la paz, la tolerancia y el desarrollo sostenible. La preservación y celebración de la diversidad cultural es, por lo tanto, una tarea compartida que requiere el esfuerzo de individuos, comunidades y gobiernos a nivel mundial.
3. DISCRIMINACIÓN
La desigualdad, y, sobre todo, la interpretación que la sociedad hace de esa desigualdad produce situaciones de discriminación porque desconocen los principios básicos de la dignidad humana. Las prácticas discriminatorias de una sociedad se manifiestan en múltiples acciones, por ejemplo, hostigar, maltratar y excluir a personas o grupos por atribuirles características diferentes a las consideradas “normales”. Ese criterio de “normalidad” es una construcción de la sociedad que no tiene fundamentos racionales.
Discriminar es seleccionar, elegir excluyendo. Aplicado el concepto de la discriminación como forma de violación de los derechos humanos, significa seleccionar a algunas personas o identidades culturales como no merecedoras de ciertos derechos humanos fundamentando esa elección por razones de género, rasgos físicos, origen nacional o étnico, situación socioeconómica, tradiciones culturales, creencias religiosas o estilos de vida.
3.1. La discriminación positiva
La discriminación positiva o legítima, son medidas que los gobiernos y las distintas organizaciones toman, con el objetivo de contrarrestar las situaciones de vulnerabilidad de las personas y los grupos para que disfruten de sus derechos. Por ejemplo, el establecimiento de cupos femeninos en las listas electorales, la promoción de puestos de trabajo para personas con discapacidad, la exención o rebaja de impuestos para las personas ancianas, entre otros.
4. LA CONSTRUCCIÓN DE LA IDENTIDAD: DIFERENTES ENFOQUES
La identidad es un concepto complejo que se refiere a la percepción que una persona tiene de sí misma y la manera en que se define en relación con su entorno social, cultural, y personal. La construcción de la identidad es un proceso dinámico, influido por múltiples factores que interactúan entre sí a lo largo de la vida.
a) Enfoque Psicológico
Teoría Psicosocial de Erik Erikson
Uno de los enfoques más influyentes en la psicología es la teoría del desarrollo psicosocial de Erik Erikson. Según Erikson, la identidad se forma a lo largo de ocho etapas de la vida, cada una de las cuales presenta un conflicto que debe resolverse para avanzar al siguiente nivel de desarrollo. Durante la adolescencia, el conflicto central es la "identidad frente a la confusión de roles," donde los individuos exploran diferentes roles y valores para formar una identidad coherente.
Características:
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Proceso de exploración: Los adolescentes experimentan con diferentes roles y perspectivas para encontrar un sentido de identidad.
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Conflicto y resolución: La resolución exitosa del conflicto de identidad conduce a un sentido firme de sí mismo; de lo contrario, puede llevar a la confusión de roles.
Ejemplo: Un adolescente que participa en diversas actividades extracurriculares como deportes, arte y grupos de debate, está explorando diferentes aspectos de su identidad antes de comprometerse con un camino específico.
b) Enfoque Sociocultural
Teoría de la Identidad Social de Henri Tajfel
La Teoría de la Identidad Social, propuesta por Henri Tajfel, sostiene que la identidad de una persona está en gran medida influenciada por su pertenencia a grupos sociales. Las personas categorizan a los demás (y a sí mismas) en diferentes grupos, como género, etnia, religión, o nacionalidad, y esta pertenencia a grupos forma una parte crucial de su identidad.
Características:
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Pertenencia a grupos: La identidad se construye en parte por la pertenencia a grupos sociales, y los individuos tienden a favorecer a los miembros de su propio grupo (endogrupo) frente a los de otros grupos (exogrupo).
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Autoestima basada en grupos: La pertenencia a un grupo exitoso o valorado puede mejorar la autoestima del individuo.
Ejemplo: Una persona que se identifica fuertemente con su nacionalidad puede sentir orgullo por los logros de su país y participar activamente en celebraciones nacionales, lo que refuerza su identidad nacional.
c) Enfoque Postmoderno
Identidad Fragmentada
El enfoque postmoderno desafía las ideas tradicionales de una identidad fija y coherente. Según este enfoque, la identidad es fragmentada y múltiple, construida a través de diferentes contextos y roles sociales que una persona asume en la vida cotidiana. Las identidades no son estáticas, sino que cambian y se adaptan dependiendo de la situación y el entorno social.
Características:
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Identidades múltiples: Las personas pueden tener múltiples identidades que varían según el contexto social.
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Flexibilidad y cambio: La identidad es fluida, adaptándose a las diferentes exigencias y situaciones sociales.
Ejemplo: Una persona puede tener una identidad profesional como abogado, una identidad familiar como padre o madre, y una identidad personal como aficionado a un deporte, todas las cuales pueden coexistir y cambiar en función de las circunstancias.
d) Enfoque Cultural
Identidad Cultural y Globalización
La identidad cultural se refiere a la conexión de una persona con su cultura de origen, incluyendo valores, tradiciones, idioma, y costumbres. En el contexto de la globalización, las identidades culturales están en constante interacción y transformación, lo que lleva a la creación de identidades híbridas.
Características:
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Raíces culturales: La identidad está profundamente influenciada por la cultura en la que una persona crece.
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Globalización e hibridación: Las interacciones culturales globales pueden dar lugar a identidades híbridas, que combinan elementos de múltiples culturas.
Ejemplo: Un joven nacido en Argentina de padres japoneses puede combinar elementos de ambas culturas en su identidad, celebrando tanto las tradiciones argentinas como las japonesas.
La construcción de la identidad es un proceso complejo, influido por factores psicológicos, sociales, culturales, y contextuales. Los diferentes enfoques brindan perspectivas variadas sobre cómo se forma la identidad, desde la exploración personal en la adolescencia hasta la influencia de grupos sociales y la cultura. Estos enfoques no son excluyentes; más bien, se complementan y se entrelazan para ofrecer una visión completa de la identidad humana.
La identidad es, en última instancia, un reflejo de las múltiples dimensiones de la vida de una persona y se desarrolla a través de la interacción continua entre el individuo y su entorno.
8. ACTIVIDADES
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