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ESI:
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IDENTIDAD SEXUAL O DE GÉNERO
El sexo es biológico (nuestros órganos genitales, las hormonas, etc.), pero el género es un estado
social y legal que nos identifica como varones o mujeres y que se relaciona con las expectativas
que la sociedad tiene respecto a cómo debe comportarse cada uno y con la propia percepción que
nosotros tenemos sobre nosotros mismos. El hecho de ser hombre o ser mujer no se agota en los
órganos sexuales con los que nacemos. La identidad sexual o de género es una vivencia interna
e individual que puede corresponder o no con el sexo asignado al nacer. La identidad de género,
esto es, sentirse, percibirse y actuar como hombre o como mujer, es una compleja construcción
que vamos haciendo a lo largo de nuestra vida. -
Video explicativo:
https://www.youtube.com/watch?app=desktop&v=rbLIV7xFfSo
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Como en cualquier identidad, la aceptación por parte de la familia y de toda la sociedad es clave
para que toda persona pueda tener una vida plena, sin discriminaciones y pueda decidir su vida
sexual libremente. La diversidad sexual es una realidad en nuestra sociedad y es importante una
mirada positiva sobre ella para enriquecer nuestra democracia.
En este sentido, el reconocimiento del derecho a la identidad de género por parte del Estado, es un
paso fundamental en una sociedad diversa y con derecho a una vida digna para todos. La Ley de
Identidad de Género considera que toda persona tiene derecho al reconocimiento de su identidad
sexual o de género, al libre desarrollo de su persona conforme a ella y a ser tratada de acuerdo
a la misma. Esto implica respetar e incluir en los instrumentos que acreditan su identidad (DNI,
pasaporte, etc.) el género que vivencia y con el cual se identifica. - LO OTRO, LA ALTERIDAD
Retomemos la idea de que en la construcción de nuestra identidad, lo individual y lo social son dos caras de la misma moneda. Según el sociólogo inglés Richard Jenkins, lo individual enfatiza la diferencia, el individuo se define diferenciándose de lo que no es. Podemos imaginar que el personaje que habíamos inventado, Emilia, ¿la recuerdan?, creció y puede decir quién es, porque sabe quién no-es. No es varón, pero además se reconoce como una joven no delicada y no tranquila, etc.
Con respecto en cambio a la identidad social, lo que se resalta en ella son las similitudes con los demás, con el otro. En este proceso simultáneo, me diferencio del otro (no me visto de tal o cual manera, no escucho tal música, no, no, no…) y busco similitudes con aquellos con quienes quiero estar y pertenecer (me visto como tal, escucho tal música, etc., etc.).
Esto sucede tanto en mi pequeño grupo de pares, donde busco estar con aquellos con quienes siento afinidad, como en un plano mayor, cuando me pienso como argentino, o como latinoamericano, o como adolescente, o como estudiante, etc. En lo social, se realza lo que me identifica en común con el otro, a la vez también necesito tener presente lo que no me identifica con otros. - Parece un trabalenguas, pero pensemos. Ser argentino, me identifica con los que habitan este territorio, con los que hablan esta lengua y participan de ciertas costumbres comunes y por esas mismas razones, pero en su negativa, puedo reconocer que no soy colombiano, brasilero o chino.
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Vencimiento: martes, 20 de agosto de 2024, 15:44
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