2. Robótica Educativa

La robótica educativa es una su disciplina de la robótica aplicada al ámbito educativo que se centra en el diseño, el análisis, la aplicación y la operación de robots. Se puede enseñar en todos los niveles educativos, desde la educación infantil y primaria hasta los posgrados. La robótica también se puede utilizar para fomentar y facilitar la instrucción en otras disciplinas, tales como la programación informática, la inteligencia artificial o la ingeniería de diseño.

La robótica educativa es aquella que "busca despertar el interés de los estudiantes transformando las asignaturas tradicionales en más atractivas e integradoras, al crear entornos de aprendizaje propicios, que recreen los problemas del ambiente que los rodea" (Quiroga 2018). 

En el caso de la enseñanza infantil y primaria, la robótica educativa pone a disposición de los alumnos todo lo necesario para construir y programar de forma sencilla un robot capaz de ejecutar diferentes tareas. Sin embargo, esta disciplina va mucho más allá de crear robots y programarlos, sino que  ayudan a los niños a desarrollar, mientras juegan, una de las habilidades cognitivas básicas del pensamiento lógico matemático: el pensamiento computacional. Es decir, ayudan a desarrollar el proceso mental que utilizamos para resolver problemas de diversa índole mediante una secuencia de acciones ordenadas.


Además de desarrollar el pensamiento computacional, los robots educativos favorecen el desarrollo de otras habilidades cognitivas entre niños y jóvenes:

  • Aprender de los errores: descubrir que los errores no son definitivos sino una fuente de nuevas conclusiones es una valiosa lección para el futuro.
  • Trabajo en equipo: el planteamiento de retos grupales fomenta la socialización y colaboración.
  • Adaptación: debido al creciente aumento de la automatización y los aparatos inteligentes, familiarizarse con el uso de robots les hará estar más adaptados al mundo del mañana.
  • Creatividad: la búsqueda de soluciones y la libertad para asignarle nuevas funciones a estos robots estimula la imaginación y creatividad.
  • Autoestima: la consecución de éxitos en un campo novedoso mejora la percepción que los estudiantes tienen de sí mismos.
  • Emprendimiento: además de aumentar su autoestima, los éxitos en un campo les impulsan a abordar nuevas tareas en otros campos.
  • Autoevaluación: al poder ver los resultados de sus actos al momento, sin necesidad de que un adulto les diga si lo han hecho bien o mal, los estudiantes aprenden a evaluar su propio desempeño.
  • Aplicaciones prácticas: el hecho de poner en práctica conocimientos matemáticos o físicos aprendidos en el colegio motiva a los niños y jóvenes a seguir estudiando estas materias.
  • Más habilidades cognitivas sobre las que los robots educativos influyen positivamente son la responsabilidad, el orden y un desarrollo más óptimo de la percepción espacial y de las relaciones entre objetos.

Robots Educativos: 

La robótica educativa pone a disposición de los alumnos todo lo necesario para construir y programar de forma sencilla un robot capaz de ejecutar diferentes tareas. Un robot educativo es aquel destinado a servir como una fuente de conocimiento confiable. 

Una de sus características principales es la de proporcionar diversión y entretenimiento en el repaso del contenido escolar. De esta manera, el niño tiene la idea de un juguete que, al mismo tiempo, le ayuda en el repaso de la materia.

En el mercado es posible encontrar numerosos kit educativos de robótica con funcionalidades similares y otras diferentes, mas simples o mas complejos y para diferentes niveles educativos.

 

Kit de Robótica Educativa Q-Scout: 

Q-Scout es un kit de robótica educativa para el nivel primario que posee una estructura metálica a la cual se pueden anexar piezas de expansión como vigas, placas y más sensores, lo que permite realizar múltiples actividades con los estudiantes.