Cuando una organización realiza su estructura
organizacional persigue alcanzar lo siguiente: ● Determinar
los distintos departamentos y áreas de funcionamiento que integran la
organización. ● Crear
el sistema jerárquico entre los diferentes puestos de trabajo y áreas de
responsabilidad. ● Delinear
los perfiles de puestos para definir las tareas y responsabilidades de cada
miembro de la organización. Sin duda, todo esto facilita que se dé una
correcta división de tareas, las cuáles se desarrollan con eficiencia y esto
permite evitar el surgimiento de confusiones y de conflictos.