3. La Comunicación De Los Medios Masivos

Cuando hablamos de medios masivos de comunicación, es necesario aclarar cuáles son las particularidades del circuito comunicativo que se establece entre emisores y receptores. En su forma tradicional, el circuito comunicativo se construye cuando un emisor le transmite cierta información a un receptor a través de un mensaje. En los medios masivos, la comunicación se establece entre un emisor único o unificado (en el caso de una institución que produce los contenidos a ser transmitidos), y un receptor que es pensado como masivo por el emisor. Entonces, la empresa o el Estado que emite un mensaje a través de un medio masivo, nunca sabe efectivamente quién puede estar del otro lado, pero construye una idea de un público potencial, es decir, un estereotipo social que posiblemente consuma el bien cultural que se propone. Este público se piensa primero como heterogéneo (diverso) y anónimo, pero LA COMUNICACIÓN DE LOS MEDIOS MASIVOS luego se le asocian determinadas características que lo definen, por ejemplo: el productor de un programa televisivo sobre cocina está pensando, fundamentalmente, en un público al que le guste la cocina y que tenga intenciones de aprender nuevas recetas, aunque no sepa de manera efectiva si al programa lo van a ver mujeres, hombres, niños, ancianos, etc. En otras ocasiones, hay bienes culturales que se producen con una definición rígida de su público potencial, por ejemplo: una página de Internet que integre distintas notas periodísticas y videos on-line referidos únicamente al bullying en la Escuela (entendiendo por bullying la violencia física y/o verbal entre compañeros), y que para encontrarla haya que escribir específicamente ese tema en los buscadores. ¿A quiénes estaría dirigida una página de estas características?