Las nubes son acumulaciones visibles de pequeñas partículas de agua líquida, cristales de hielo o una mezcla de ambas, suspendidas en la atmósfera. Se forman cuando el vapor de agua en el aire se enfría y se condensa en gotitas de agua o se sublima en cristales de hielo alrededor de partículas microscópicas como polvo, sal marina o polen, conocidas como núcleos de condensación. Formación de las Nubes Evaporación y Humedad: El agua de la superficie terrestre (océanos, ríos, lagos, etc.) se evapora debido al calor del sol, convirtiéndose en vapor de agua. A medida que el vapor de agua asciende, se mezcla con el aire y aumenta la humedad. Ascenso del Aire: El aire caliente, que es menos denso, tiende a ascender. A medida que asciende, se expande y se enfría. El enfriamiento del aire reduce su capacidad de retener vapor de agua, lo que provoca la condensación. Condensación: Cuando el aire se enfría hasta su punto de rocío, el vapor de agua comienza a condensarse en pequeñas gotas alrededor de los núcleos de condensación. Estas gotitas forman una nube visible. b) Clasificación de las Nubes Las nubes se clasifican principalmente según su forma y altitud. La clasificación más común es por su forma: Cirros: Delgadas y fibrosas. Cúmulos: Algodonosas y abultadas. Estratos: Planas y uniformes. Nimbos: Asociadas con precipitaciones. c) Importancia de las Nubes Regulación Climática: Las nubes juegan un papel crucial en la regulación de la temperatura de la Tierra al reflejar parte de la radiación solar de vuelta al espacio y atrapar el calor en la atmósfera. Ciclo del Agua: Las nubes son una parte esencial del ciclo del agua, facilitando la precipitación y la distribución del agua en todo el planeta. Meteorología: El estudio de las nubes es fundamental para la predicción del tiempo y la comprensión de los fenómenos meteorológicos. Ecosistemas: Las nubes afectan los ecosistemas al influir en la cantidad de luz solar y precipitación que reciben diferentes regiones.