Implementación de estrategias de reciclaje y
reducción de desechos en las industrias para minimizar la contaminación. Los residuos sólidos urbanos (RSU) son
análogos a los denominados domiciliarios y pueden ser de origen residencial,
urbano, comercial, asistencial, sanitario, industrial o institucional, con
excepción de aquellos que se encuentren regulados por normas específicas. La cantidad de RSU que generan (directa o
indirectamente) los habitantes de un área refleja las condiciones de producción
y consumo de la sociedad. Los residuos repercuten a largo plazo en la salud
humana y el ambiente. Cuando las instalaciones de recuperación y
disposición final de RSU no cumplen con los requisitos mínimos de
impermeabilidad de los suelos donde se emplazan, ni con las distancias a las
napas freáticas, a los cursos de aguas superficiales, a los centros urbanos u
otras áreas susceptibles de recibir los impactos derivados de estas
instalaciones, se producen impactos negativos sobre el ambiente y la salud
humana. En Argentina, el manejo de los RSU está
regulado por la Ley de Presupuestos Mínimos 25916 que establece los
presupuestos mínimos para un manejo adecuado de los residuos domiciliarios, a
partir de propender a una gestión integral de los mismos, propiciar su valorización
y promover su minimización en la generación y disposición final. En términos
generales, comprenden desechos de hogares y centros comerciales, oficinas e
industrias que, dada su composición, son comparables con aquellos generados en
domicilios particulares.