3. ¿Qué es un delito informático?
¿Qué es un delito informático?
Los delitos informáticos o ciberdelitos son todas aquellas conductas ilícitas o ilegales que vulneran derechos o libertades de las personas y utilizan un dispositivo informático como medio para la comisión del mismo o como fin.
Un dispositivo informático es toda aquella tecnología que procesa automáticamente datos e información, como por ejemplo, una computadora, un celular inteligente, una tablet, una televisión inteligente, una consola de videojuegos o cualquier dispositivo que tenga conexión a Internet, entre otros.
El dispositivo actúa “como medio” para la comisión de un delito, por ejemplo, cuando una persona amenaza o acosa a otra u otras y lo realiza a través de esta tecnología. Y actúa “como fin” cuando el blanco del delito es la propia tecnología, por ejemplo, cuando un malware o software malicioso, como un virus, afecta y altera el normal funcionamiento del dispositivo o los datos y la información que almacena.
En este sentido, el cibercrimen no representa un tipo de criminalidad específica en tanto que nuclea a un conjunto de delitos que adoptan esta definición por el lugar que ocupa la tecnología, más que por la naturaleza criminal del acto mismo. La definición de delitos informáticos es instrumental.
Durante los dos primeros años de la pandemia del COVID-19, en Argentina, se produjo un incremento de denuncias sobre diferentes modalidades delictivas sucedidas en Internet. El aumento de casos pudo surgir por un mayor uso de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, de servicios y aplicaciones de Internet, surgidos a partir de la implementación del teletrabajo, la educación a distancia y el pago de servicios, generado por el aumento del comercio electrónico.
Una característica propia de los delitos informáticos cometidos en este contexto excepcional de pandemia es una mayor sofisticación y complejidad en las técnicas de comisión de estos ilícitos, tanto así como la aparición de asociaciones ilícitas y de bandas con cierto grado de organización, que toman al cibercrimen como emprendimiento delictivo.
Las modalidades detectadas más frecuentes pueden agruparse en tres tipos: los fraudes y estafas en línea a nivel de usuarios particulares, los ataques de ransomware a organizaciones y el blanqueo ilícito de capitales por Internet. Esto arroja como resultado la presencia de nuevas modalidades de delitos ya existentes. De estas tres modalidades de fraude, nos interesa profundizar en las primeras.
La Organización de Naciones Unidas reconoce los siguientes tipos de delitos informáticos:
1. Fraudes cometidos mediante manipulación de computadoras; la manipulación de datos de entrada (sustraer datos), manipulación de programas (modificar programas del sistema o insertar nuevos programas o rutinas), manipulación de los datos de salida (fijación de un objeto al funcionamiento de sistemas de información, el caso de los cajeros automáticos) y fraude efectuado por manipulación informática (se sacan pequeñas cantidades de dinero de unas cuentas a otras).
2. Manipulación de datos de entrada; como objetivo cuando se altera directamente los datos de una información computarizada. Como instrumento cuando se usan las computadoras como medio de falsificación de documentos.
3. Daños o modificaciones de programas o datos computarizados; entran tres formas de delitos: sabotaje informático (eliminar o modificar sin autorización funciones o datos de una computadora con el objeto de obstaculizar el funcionamiento) y acceso no autorizado a servicios y sistemas informáticos (ya sea por curiosidad, espionaje o por sabotaje).
La criminalidad informática incluye una amplia variedad de delitos informáticos. El fenómeno se puede analizar en dos grupos:
1. Informática como objeto del delito: esta categoría incluye por ejemplo el sabotaje informático, la piratería informática, el hackeo, el crackeo (cracking es la modificación del software con la intención de eliminar los métodos de protección de los cuales este disponga: protección de copias, versiones de prueba, números de serie, claves de hardware, verificación de fechas, verificación de CD o publicidad) y el DDNS (Denegación de servicio de nombres de dominio).
2. Informática como medio del delito: dentro de este grupo se encuentra la falsificación de documento electrónico, cajeros automáticos y tarjetas de crédito, robo de identidad, phreaking, fraudes electrónicos y pornografía infantil.