En muchas ocasiones la literatura en la Unión Soviética
se dividió según su fidelidad al régimen, como lo recuerda la presión del
gobierno de Moscú en 1958 para que Boris Pasternak rechazara el Nobel. En
contraste, también hubo escritores no solo leales al Sóviet Supremo, sino a
quienes el conflicto los convirtió en propagandistas culturales del estado. Uno
de ellos fue Ilyá Ehrenburg (1891-1967), simpatizante de la Revolución desde
sus primeros años y frecuente corresponsal de los aliados Durante la Segunda
Guerra Mundial, para el inicio de la Guerra Fría había sido reconocido en Moscú
como diputado y recibido el Premio Lenin de la Paz. Fuera de esas polémicas, el
escritor colombiano Jorge Zalamea decidió recordar a Ehrenburg por la parte
menos conocida de su vida pública: su obra poética. Pero, de la misma forma, también hubo en Rusia posturas
intelectuales que, sin ser disidentes ni defensores del régimen, abogaban por
una postura intermedia. Una de las figuras más notables de ese movimiento fue
Yevgueni Yevtushenko (1932-2017), quien visitó Colombia a principios de 1968,
el año en el que los regímenes políticos de ambos bloques fueron desafiados por
la juventud y la sociedad civil. Esta visita histórica fue cubierta por
Inravisión, en cuyos estudios fue entrevistado el poeta por Gloria Valencia de
Castaño. En el audio de esta entrevista, hoy parte del archivo de la HJCK,
Yevtushenko reflexiona sobre los riesgos de un oficio aparentemente inofensivo
como el suyo, pensamiento más que oportuno para un símbolo de una generación
que clamaba por cambios profundos en la política y la sociedad de su país. Un símbolo ampliamente reconocido en el mundo de los
movimientos políticos y sociales de 1968, fue el escritor checo Milan Kundera
(1929), de quien presentamos esta reseña biográfica realizada en 1990 por el
librero Hans Ungar para la HJCK. La obra literaria de Kundera se ha
caracterizado por reflexionar alrededor de los conflictos políticos de su país,
que le costaron el exilio, la revocación
de su ciudadanía y la prohibición de su obra: el estalinismo en La broma, la
invasión soviética a Praga en La insoportable levedad del ser o la represión
del régimen checoslovaco en El libro de la risa y el olvido. Mientras su país
inauguraba un nuevo régimen derivado de la Revolución de Terciopelo, en esta grabación
se comenta el lanzamiento de su novela La inmortalidad, un paso hacia temas más
cosmopolitas y apolíticos en el trabajo de Kundera.