La palabra
“Estado” la utilizamos con frecuencia y nos resulta familiar, sin embargo, las
múltiples relaciones político sociales que moldean al Estado dificultan la
posibilidad de dar una definición breve. Puede definirse
al Estado como una institución de dominación política que en una sociedad está
territorialmente delimitada. El Estado es una
institución porque perdura a lo largo del tiempo: los medios que utiliza para
ejercer la autoridad y la administración
(las leyes, el sistema de justicia, la administración pública, etc.) tienden a
ser continuos en sus características y funciones principales. La dominación,
puede ser entendida como la capacidad que tienen algunos sujetos o grupos para
imponer regularmente su voluntad sobre otros. Lleva adelante funciones de
control y orden en una sociedad y territorio claramente determinados.