1. LOS PRECIOS DE VENTA

Hablamos del Mercado y de los costos. Y en ambas conceptualizaciones mencionamos el tema de los precios. Es hora de adentrarnos un poco más en ese aspecto
Uno de los aspectos clave de un proyecto económico es la determinación del precio de venta de un producto o servicio. Para calcularlo hay varias cuestiones a tener en cuenta, una de las más importantes es el costo de lo que se venderá. En términos generales, y normales, el precio de venta debería superar a los costos. Es por ello que resulta insistente, pero a la vez necesario, hacer hincapié en que el proyecto debe determinar y conocer al detalle su estructura de costos.
Una forma de determinar el precio de venta (la más utilizada) es considerar un margen de beneficio por sobre el costo y aplicarlo directamente. De esa forma nos aseguramos que cualquier variación de los costos se trasladará inmediatamente a los precios.
Recordando a los factores de la producción de la economía si consideramos al empresario como uno más de ellos es automático el precio considerando que, ante un aumento de los otros costos, el empresario decidiera aumentar su retribución en una proporción similar.
Ahora bien, al momento de salir al mercado con nuestro producto o servicio debemos considerar a la competencia. Si nuestro precio es muy superior al de la competencia y no logramos diferenciarnos lo suficiente es probable que nuestras ventas bajen.
Es importante recordar acá algo que ya habíamos visto, que es el mercado. Es obvio que si tenemos el monopolio la determinación de los precios dependerá, casi con exclusividad, de la decisión de nuestra empresa. Recordemos también que uno de los objetivos de las firmas en la competencia monopolística era, justamente, diferenciar el producto lo suficiente como para quedarse con el monopolio. Resulta indudable entonces que el manejo del mercado nos dará mucha más autonomía en las decisiones.
Como resumen de lo visto hasta acá podríamos decir que el precio del producto debe ser lo sobradamente alto para cubrir los costos, pero también lo suficientemente bajo como para resultar competitivo.